Naif en la premiére de Donde Viven los monstruos

Por Berta García
Fotos Bruno Pacheco

La sorpresa cinematográfica navideña de este año viene de la mano de Spike Jonze y pretende profundizar en las emociones. El matiz psicológico habitual del director esta vez se acompaña de una ternura espeluznante, para hacer brotar en el espectador las ganas de abrazar y amar.
Max, el protagonista, es un niño que no encuentra con quién compartir sus inquietudes, se siente incomprendido por su familia y su frustración le lleva a actuar de forma agresiva. La incomprensión que sienten los niños ante el mundo adulto es una emoción que el film transmite de forma muy cercana e identificativa.
La isla de los monstruos es diferente, allí nadie es juzgado por su aspecto físico, priman las necesidades naturales, lo absurdo es espectacular y lo importante es divertirse haciendo el bestia, como a Max le gusta. Los monstruos creen que Max es un antiguo y pequeño rey. Confían en él a pesar de ser un niño. Porque los niños también piensan, sienten y, en ocasiones, son infelices. Donde Viven los Monstruos nos enseña que la inexperiencia de un niño no debe ser un factor de infravaloración. Spike Jonzes nos anima a aprender de ellos, como hacen los monstruos. Confiemos y divirtámonos.
Estreno 18 de diciembre